18/10/16

Exposición sobre el Maestro Mateo en el museo del Prado






El museo del Prado muestra una exposición de piezas atribuidas al Maestro Mateo, en una de las rotondas de la planta principal, entre las fechas del 29 de noviembre del año 2016 hasta el 26 de marzo del año 2017. La mayoría de ellas pertenecen a la desaparecida fachada oeste de la catedral de Santiago, realizada por el citado maestro, aunque hay alguna otra que no se corresponde con esa ubicación. La concusión de la catedral románica de Santiago fue posible gracias a que el rey de León Fernando II encomendó al Maestro Mateo, en los últimos días de febrero de 1168, que se hiciese cargo de las obras hasta su terminación, por ello recibiría un generoso sueldo vitalicio. Al aceptar el encargo real la construcción catedralicia no sólo distaba de una terminación inmediata, sino que los problemas constructivos eran muy complejos no sólo por los usos a los que debía de dar respuesta adecuada, sino por otros entre los que no era el menor la orografía del terreno. En consecuencia, el Maestro Mateo tenía que concluir las naves de la catedral, proyectar una cripta que sirviera de basamento al Pórtico de la Gloria, la fachada occidental del templo y, finalmente, crear un coro pétreo, que ocupó los primeros tramos de la nave mayor catedralicia, para los usos litúrgicos propios del cabildo compostelano. Aunque el documento de donación de Fernando II está fechado el 23 de febrero de 1168 la consagración de la catedral, una vez concluida, no tuvo lugar hasta el 23 de abril de 1211.


          La fachada occidental de la catedral permanecía siempre abierta, seguramente porque el acceso por ella era inusual y a través de la cripta, y todavía en 1520 carecía de puertas de madera. Entonces el cabildo catedralicio decidió colocarlas y para ello fue necesario derribar las puertas medievales. De ellas proceden las ocho estatuas-columna que exhibe el Museo del Pardo, de Madrid, hasta finales de marzo de 2017, a las que se suma una excepcional cabeza de una novena figura, perdida. La exposición se completa con otros elementos de la antigua fachada: fragmentos de un rosetón y dovelas que por su iconografía parecen haber pertenecido a la puerta sur. Finalmente, la exposición se completa con dos magníficas piezas procedentes del derruido coro pétreo que el maestro Mateo y su taller labraron y colocaron en los primeros tramos de la nave mayor catedralicia, donde permaneció hasta los primeros años del siglo XVII, fecha en la que fue sustituido por otro de madera adecuado a las disposiciones emanadas del Concilio de Trento. 


          Es la primera exposición que, con carácter monográfico, se dedica al maestro Mateo y a su taller, ya que la amplitud de la obra realizada en la catedral de Santiago hizo imprescindible la existencia de un taller en el que trabajaban artistas de diferente valía, como ponen de manifiesto las piezas expuestas en el Museo del Prado. Todas se deben al genio creador de Mateo en cuanto a sus iconografías, no siempre indudables, sino también en cuanto a su ejecución técnica. La posibilidad de apreciar esta labor de taller es, desde luego, una de las aportaciones de la breve y selecta exposición que comento en estas breves líneas introductorias de una excelente selección de fotografías del ámbito en el que estuvieron las imágenes y piezas ahora expuestas de manera conjunta por primera y, quizá, única ocasión.


          La exposición se distribuye en dos salas del Museo del Prado. En la primera se encuentra la recomposición de una parte del gran rosetón que coronaba el cuerpo central de la catedral, como se ve en el dibujo de mediados del siglo XVII de la autoría del canónigo Vega y Verdugo. A su lado, el pergamino original en el que el rey Fernando II vincula al maestro Mateo a las obras de la catedral compostelana hasta el final de sus días y de manera exclusiva. Finalmente, cierran esta primera sala dos dovelas, seguramente procedentes de la portada sur de la fachada medieval, en las que se representa de manera explícita el castigo que recibirán los lujuriosos en el momento del Juicio Final.


          En la segunda sala se encuentran todas las estatuas-columna de la antigua fachada occidental que se conocen en la actualidad. Todas representan a personajes del Antiguo Testamento: reyes y profetas. Los primeros, David y Salomón, tienen una identificación segura y son piezas de especial valor escultórico que es deseable que se integren en el Museo Catedral colocándose en la escalinata del Obradoiro unas réplicas. Dos, que estuvieron situadas en las jambas, pertenecen al Museo de Pontevedra, representan a sendos profetas y su calidad escultórica es muy destacable. Finalmente, las tres figuras restantes también representan a profetas, tienen gran fuerza expresiva y monumentalidad, aunque fueron esculpidas por diferentes autores. Las dos sedentes pertenecen a una colección privada; la tercera, fue gozosamente encontrada en un recóndito lugar de la catedral el día que se presentó la actual exposición por lo que es la primera ocasión que se exhibe. Completa este grupo una magnífica cabeza de excepcional calidad escultórica que a pesar de haberla publicado hace casi veinte años es la primera ocasión en que se expone ya que pertenece a una colección privada.


          No se puede entender la totalidad de la obra de maestro Mateo y su taller sin la presencia de otros restos de su fachada occidental, representados por el precioso fragmento de rosetón, el “espejo grande” de los documentos antiguos ni, por supuesto, el coro pétreo. De él se exponen dos de sus mejores piezas: el evangelista san Mateo, que escribe su texto sobre un pequeño pupitre apoyado en sus rodillas; y los caballos del cortejo de los Reyes Magos que estuvo colocado junto al arco de la puerta del trascoro, donde se representaba una adoración de los Magos. Su naturalismo, delicadeza de talla y restos de policromía lo hacen equiparable a otras obras europeas del 1200.


          Maestro Mateo y su taller fueron no los epígonos del románico, sino los precursores de una nueva manera de entender la vida, la religión y el arte.



Doctor Ramón Yzquierdo Perrín

Catedrático de Historia del Arte Antiguo y Medieval

Universidad de A Coruña – Galicia – España



Nota: En este mismo blog existen cuatro reportajes fotográficos sobre la obra del Maestro Mateo en la catedral de Santiago. Llevan por título: EL CORO DEL MAESTRO MATEO, LOS INSTRUMENTOS MUSICALES DEL PÓRTICO DE LA GLORIA, APÓSTOLES Y PROFETAS, LA PUERTA SANTA DE LA CATEDRAL DE SANTIAGO. Pueden encontrarse pulsando sus iniciales en la pestaña ETIQUETAS, en la parte derecha de la pantalla de inicio del blog.


Del mismo modo, y en este mismo blog, el profesor Ramón Yzquierdo Perrín ha escrito la mejor y más reciente biografía estilística sobre el Maestro Mateo, al igual que un detallado artículo sobre las obras de finalización de la catedral de Santiago realizadas por Mateo y sus talleres. Ambas obras se pueden encontrar en la pestaña COLABORACIONES FOTOGRÁFICAS, en la parte derecha de la pantalla de inicio.








 
 
Etapas constructivas de la catedral de Santiago. En rojo la intervención del Maestro Mateo



Actuación del Maestro Mateo en el cierre de la fachada occidental de la catedral de Santiago



Planta de la catedral de Santiago. Pórtico de la Gloria, en rojo



Pórtico de la Gloria, en rojo




El Maestro Mateo. Dibujo de Arturo Franco Taboada




Fachada románica del Maestro Mateo. Dibujo Arturo Franco Taboada




El Pórtico de la Gloria. Dibujo de Arturo Franco Taboada


Dinteles del Pórtico de la Gloria


Contrato del rey Fernando II al Maestro Mateo, 1688. Archivo de la catedral de Santiago


Detalles





Fachada del Obradoiro en 1657,con la fachada románica del Maestro Mateo, según dibujo de Vega y Verdugo


Fachada románica del Maestro Mateo, según dibujo de Vega y Verdugo (1657), y 
J. K. Conant


Fachada actual del Obradoiro. Casas y Novoa 1750.


Exposición de esculturaas del Maestro Mateo en el Museo del Prado




Alzado exterior del Pórtico de la Gloria, según R. Otero Túñez y J. R Soraluce Blond




Profeta. Ca. 1168-1211. Granito . Museo de Pontevedra









Profeta. Ca 1188-1211. Granito  Museo de  Pontevedra














Profeta. Ca 1168-1211. Granito. Colección particular


 




















Profeta. Ca 1168-1211. Granito. Colección particular





























Profeta. Ca 1168-1211. Granito. Museo. Catedral de Santiago

































Figura sedente con espada. Ca 1168-1211. Granito. Colección particular



 




















Cabeza de varón. Ca 1168-1211. Granito. Colección particular


    

David. Ca 1168-1211. Granito. Fachada del Obradoiro










Salomón. Ca 1168-1211. Granito. Fachada del Obradoiro
  























Dovela. Castigo de la lujuria. Ca 1200. Museo. Catedral de Santiago



 
Dovela. Castigo de la lujuria. Ca 1200. Museo. Catedral de Santiago











San Mateo. Ca 1200. Granito. Museo. Catedral de Santiago







































Torreón y caballos del cortejo de los Reyes Magos . Ca 1200. Granito, policromía original. Museo. Catedral de Santiago



 










Rosetón de la fachada románica del Maestro Mateo. Granito. Ca. 1200. Museo. Catedral de Santiago


Supuesto autorretrato del Maestro Mateo. Pórtico de la Gloria. Granito. Ca 1211